Foto Asociación Contraluz (Palencia)
De nuevo exploramos sensaciones, emociones…; más juegos para experimentar. Pinceladas olorosas por el cuello, la frente, el muslo… Y a recorrer el cuerpo del compañer@, a ciegas, guiándonos sólo por el olfato.
Saboreamos suavemente,
muy despacio, trocitos de fruta y bombón; de fondo acordes de
guitarra en directo, muy juntit@s y con los sentidos (todos menos la
vista) bien alerta para disfrutar de cada instante, sin prisas por
dar el bocado final.
El ambiente que creamos
me resultó intimista y relajado. En el spa, entre burbujas y agua
calentita, nos sumergimos buscando pies que masajear. Y para acabar,
masaje a seis manos. Sentí relajarse cada parte de mi cuerpo, con
mucho tacto y mimo; manos generosas, dispuestas a complacer y a
cuidarme. También disfruté masajeando otras pieles, rincones de
cuerpos diferentes.
Me encantó acabar la sesión a una
hora temprana, seguir un horario más acorde con mi diaria rutina.
Os animo a probar….
Con
cariño,
María Jesús.
Siempre gusta recibir
visitas de personas que vienen por primera vez, y ver a otras que ya
son de la casa. Agradecemos a quienes vinieron desde Cantabria el
esfuerzo kilométrico, su actitud abierta y su buena disposición.
Esperamos veros por aquí alguna otra vez.
En nuestra sesión del
pasado 18 de abril estrenamos algunos juegos y cambiamos el masaje
en parejas por el masaje a 6 manos. Nos dividimos en grupos de cuatro
personas, dos chicos y dos chicas por grupo. Una persona recibía
masaje y los otros tres daban. Ello hacía “obligatorio” que
todos tuviéramos que masajear en algún momento a alguien de nuestro
mismo sexo, lo cual no supone nunca un problema para ellas, pero
puede resultar “incómodo” para algunos. Más o menos la mitad
de los varones manifestaron sentirse algo descolocados al tener
que masajear a otro hombre. Decidieron atrincherarse detrás de una
actitud “terapéutico-profesional” que les permitía mantener las
distancias y dejar muy claro que no había ninguna implicación
emocional. Actitudes defensivas para enfrentarse a cosas que son
tabú. Luego surgió el debate: ellos ven muy natural que ellas se
toquen, pero se encienden las alarmas cuando en algún juego,
ejercicio o masaje algún varón tiene que tocar a otro varón. Claro
que no todos lo viven así. También hay algunos que no se sienten
incómodos, incluso hay quien reconoce haber cambiado el chip después
de comprobar que “no pasa nada” por dar un masaje a otro hombre
fuera de un contexto “terapéutico-deportivo”.
Pues ahí andamos,
descubriendo cosas nuevas en cada encuentro. Tenemos cita de nuevo el
sábado 3 de mayo en Palencia. Será un intensivo de mañana y
tarde, con parada para comer.
Kisses
Kisses
Eduardo
Nos gustó la experiencia y repetiremos seguro.
ResponderEliminarPareja de Cantabria
Hola, me encanta lo que escribes! ! Yo he empezado un blog con mis experiencias personales y quiero compartirlas, laskaexperiences.blogspot.com.es
ResponderEliminarMe gustaria saber tu opinion. Un besooo
Hola Laska, gracias por tu visita y bienvenida. Ahora mismo visito tu blog.
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