miércoles, 19 de marzo de 2014

UN NUEVO INTENTO DE REVOLUCIÓN SEXUAL

                                      Sesión de fotografía erótica (Palencia 31-1-14)

Desde que Freud determinó que nuestra civilización está construida sobre energía sexual reprimida, llevamos unas cuantas generaciones intentando desmontar aquella represión, que llegó a una cumbre terrible a finales del s XIX en Occidente.
Algo hemos conseguido. Sobre todo hemos conseguido porno. Ya podemos ver tetas, culos y vaginas. Incluso pollas erectas. Podemos ver el acto en primer plano y en frenética acción.
Más me temo que todo ese show histriónico no es sino una burda parodia de la poderosa voluptuosidad que nos regala nuestra sexualidad, que un día fue considerada sagrada. Estamos a años luz del desparrame sensual que evoca Casilda Rodrigañez y otras maestras sabias que nos alertan de la inmensidad que nos estamos perdiendo, que hemos perdido.
El patriarcado ha restringido nuestra sensualidad limitándola al ámbito de la pareja. Ahí dentro, mal que bien, vamos zafando. Hay verdaderos artistas que consiguen mantener la llama de la pareja toda la vida encendida, pero en muchos casos el sexo matrimonial se convierte en algo tedioso, soporífico y triste. Inexistente a veces, infiel y putero otras. Luego están los singles, que para tener relaciones afectivas físicas plenas se las ven y se las desean.
Por mucho que haya sexo por todas las esquinas, cuando se trata de entrar en materia, de entregarse y abandonarse al placer, con frecuencia nos entra canguelo. Sobre todo a las mujeres, que cargamos todavía con una historia de la que no es nada fácil desprendernos.
Por eso no quiero hablar de sexo, de sexo ya se ha dicho mucho. Hablemos de calor humano. De ternura. De la expresión física de la ternura, esa manifestación de caricias, cosquillas y mimos que con tanta facilidad otorgamos a nuestros animales domésticos y tan cuesta arriba se nos hace con seres de nuestra misma especie.
Alexandra Kollontai avisaba de que nuestra liberación vendrá cuando el sexo sea simple y gratificante como beber un vaso de agua fresca cuando se tiene sed. Como sociedad estamos lejísimos de ese ideal. Nuestros cuerpos están acomplejados, más esclavos que nunca de la dictadura de unos insoportables, estrictos cánones de belleza. El sexo ha perdido el significado de comunicación íntima para ser un intercambio mudo, un intercambio de pasarela.
Urge re-aprender a acariciarnos, empecemos pasito a paso. Sin orgasmos que nos asusten, sin gemidos que nos espanten. Sin preocuparnos de si hay erección o flaccidez. Aceptando y disfrutando de nuestro cuerpo y de otros cuerpos. Serranos, maravillosos, bellos en su singularidad. Mirémonos a los ojos. Expresemos ternura con la piel, con las yemas de los dedos. Rocemos nuestros labios y mimemos estos cuerpecillos nuestros, que cargan tanto lastre, tanta hambre antigua de placer.

El día 28 de marzo, a las 20h tenemos taller de sensualidad en Palencia, apúntate:

Si dispones de un local adecuado en tu ciudad, ponte en contacto con nosotros

3 comentarios:

  1. "Erotismo y recuperación de lo humano"
    http://www.ivoox.com/erotismo-recuperacion-lo-humano-audio-audios-mp3_rf_2750502_1.html

    Os enlazo este audio de un artículo de un blog donde se puede encontrar más sobre erotismo (y otras cosas), por si es de vuestro interés.
    Os he descubierto hace unos días a través de Susana Moo y me interesa mucho lo que hacéis. Gracias. Abrazos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, hemos escuchado el artículo y estamos plenamente de acuerdo con Félix Rodrigo Mora. Es realmente interesante, da para pensar mucho sobre la realidad erótica y sobre muchas más cosas.

      Eliminar
  2. Enlazo esta nota sobre el curso que hicieron en febrero en Madrid. La autora del blog es también una persona comprometida con la nueva revolución erótica. Gracias por dejar comentar. http://prdlibre.blogspot.com.es/2014/02/jornada-sobreciclos-vitales-ayer-9-de.html

    ResponderEliminar